Es importante alimentar en los niños la conciencia ecológica desde chiquitines. Una manera de hacerlo es organizar un espacio para el reciclaje en casa. Nosotros lo ubicamos (como la mayoría me imagino) en el patio de servicio. Compré tres basureros de colores para diferenciar el tipo de material: uno para cartones y papeles, uno para tetrapak y uno para botellas plásticas. Sumanos además un frasco de vidrio para las pilas y un sector especial para las botellas de vidrio.
Una vez a la semana...en realidad me gustaría mucho, pero es más real una vez cada dos...cargamos el auto y llevamos todo a un punto limpio, cercano a nuestra casa. Los niños van y ayudan a depositar los materiales en los correspondientes contenedores.
Esto les enseña en forma práctica sobre el tema y sobre el manejo de desechos en casa y se hacen responsables de su basura.
