La tabla del 9 es una de las que más le cuesta aprender a los niños. Pero hay un método súper simple para recordarla con los dedos, y un enorme aporte a mantener armónicas las relaciones madre-hijos.
El sistema es realmente mágico, mira.
Con los 10 deditos de las manos estirados, el peque tiene que bajar el dedo por el cual está multiplicando el 9. Es decir, si multiplica 9x1 bajará el primer dedo de la mano izquierda, y así irá cambiando el dedo que baja, según el número por el cual multiplica.
Todos los dedos levantados a la izquierda del que bajó serán las decenas. Y todos los dedos levantados a la derecho del que bajó serán las unidades.
Es una graaaaan ayuda cuando se están tirando los pelos madre e hijo, tratando de memorizar las tablas. Aquí van las fotos.