Así que siguiendo una idea en papel, cortamos dos piezas de cartón corrugado iguales y las enfrentamos pegándolas entre sí, para darle más soporte a la estructura.
Pintamos las piezas de blanco, las manchamos con un poco de pintura ocre y las delineamos.
Además cortamos unos círculos (o cercanos a eso) y los pintamos y delineamos en negro.
Pegamos los círculos abajo y algunos arriba, para darle más cuento al asunto.
Además hicimos unas perforaciones para pasar unas cuerdas por ellos.
Y sería. Lista la lira