Si siguen el blog, se acordarán que hace algunas semanas le hice unas muñecas de trapo a mis sobrinitas. Bueno, mis niños, por supuesto, me reclamaron porque también querían lo suyo. Así que creamos tres monstruosos muñecos, uno para cada uno.
Esta vez les dejo algunas fotos del proceso, para que copien la idea.
Inicio dibujando en papel la figura que voy a hacer en tela. En este caso, los niños iban sugiriendo o dibujando ellos mismos lo que querían. Luego, corté sin molde ni nada la figura y sus piezas, combinando las telas según lo que tenía en casa. Mi idea es que sea rápido y divertido, para que los niños lo sigan, y no un trabajo de precisión que demore demasiado.
Cosí primero, con la máquina, todos los detalles que van en plano (lunares, ojos). Cerré las patas y las rellené (en los diseños que las tenían) y luego las ubiqué en el lugar en el que debían coserse. Enfrenté por el revés las partes del cuerpo y, manteniendo en su lugar (por dentro) las patas, pelos, cachos o lo que necesitara unirse por la misma costura, pasé la máquina por todo el rededor del mono. Dejé una abertura. Lo dí vuelta con un palito. Una vez listo, lo rellenamos y finalmente cosí el agujero.
Como en las muñecas, las terminaciones tienen que verse de lejos, pero como los niños a esta edad no cachan ese tema ni les importa, la verdad es que han disfrutado muchísimo de sus muñecos, con el valor de haber sido diseñados por ellos mismo.
Diseña con tus niños y utiliza todos los materiales que se te ocurran...botones, palitos, tela, bolsas plásticas, etc. La imaginación de tus niños es el límite.